Freitag, Juni 02, 2006

Gewerkschaften - Zeit zur Erpressung

Eines vorneweg: In diesem Artikel geht es nicht um Gewerkschaften in Entwicklungsländern oder Schwellenländer. Jene Gewerkschafter riskieren in den meisten Fällen Kopf und Kragen um für die Rechte der Arbeiter zu kämpfen. Dieses Kopf und Kragen riskieren ist nicht nur ein Sprichwort. Jahr für Jahr werden viele, viel zu viele, Gewerkschafter ermordet. Getötet von Todesschwadronen, die durch die jeweiligen Regierungen, Großunternehmen... angeheuert und vor dem Gesetz geschützt werden.

Reden wir über die westlichen Gewerkschaften - und hierbei müssen die österreichischen Gewerkschaften als Stellvertreter herhalten - liegt einfach nahe für mich, denn dort kenne ich mich zumindest oberflächlich mit der Situation aus. Jedes Wort der Kritik fällt mir im Grunde schwer, entstamme ich doch aus einer Gesellschaftsschicht, in der die Gewerkschaften seit jeher einen großen Stellenwert hatten. Und auch heute ist noch beinahe jeder in meinem Verwandten-, Freundes- und Bekanntenkreis Mitglied der Gewerkschaft. Aber was man grundsätzlich mag, sollte man auch kritisieren, wenn man es weiterhin mögen will.

Die Gewerkschaft hat keinen Sinn, wenn sie sich auf die selbe Stufe mit den Vertretern der Wirtschaft stellt. Die Sozialpartnerschaft? Ein nettes Konstrukt der schlechten Lösungen. Das Finden von Kompromissen ist doch nur jener Weg, der keinen Sieger hervorbringt. Gewerkschaften und Interessensvertreter müssen keine Feinde sein, aber sie müssen Gegner sein. Es kann und darf nicht sein, dass der Vertreter der Wirtschaft zum persönlichen Freund des Gewerkschafters wird. Zumindest nicht am Verhandlungstisch.

Der einzige sinnvolle Weg der Gewerkschaften wäre jetzt der Weg der Erpressung. Harte Ansage in Zeiten der Abwanderung der Industrie in Billiglohnländer? Nein, gar nicht. Denn all jene Unternehmen, die Vorteile von einer Abwanderung hätten, sind schon abgewandert. Jene Unternehmen, die noch hier sind, sind auf die Arbeitskraft und die Qualifikation ihrer Arbeitskräfte, hier, angewiesen. Wäre dem nicht so, dann wären sie auch schon weg. Den sozialen Konzern gibt es nicht. Und wenn man nicht von Konzernen spricht, sondern von Unternehmen die noch patriarchalisch geführt werden, dann ist die Situation auch nicht anders.

Unternehmen meinen, frei nach modernen betriebswirtschaftlichen Überlegungen, dass der Sinn ihrer Existenz darin besteht, möglichst hohe Gewinne zu lukrieren. Im Grunde genommen egal wie. Und hier muss die Gewerkschaft einhaken und "Nein" sagen. "Nein" zu Verschlechterungen des Gehaltes. "Nein" zu aufgeweichten Kündigungsschutz. "Nein" zur Kürzung von Sozialleistungen der Unternehmen. "Nein" zu einseitigen Modellen zur flexiblen Arbeitszeit. "Nein" zu einer Ideologie, die keine Menschen kennt.

Der Sinn der Wirtschaft wäre es, Ressourcen gezielt und maßvoll einzusetzen. Dadurch sollten Werte lukriert werden die allen zum Wohl gereichen. Den Beschäftigten, der Volkswirtschaft, dem Staat... und, ja auch dem Unternehmer. In jenem Maß, dass er für sein Risiko und seinen Arbeitseinsatz verdient. Der einzige Weg für die Gewerkschaft, der uns zumindest ansatzweise in Richtung dieses Utopia führen kann, ist jener der Erpressung und der harten Verhandlungen ohne faule Kompromisse. Alles andere führt zurück in Zeiten, die wir wohl alle nicht erleben wollen.

Sindicatos - tiempo a la extorsión

En frente: En este artículo no es sobre sindicatos en tierras de umbral o países en vías de desarrollo. Aquellos sindicalistas arriesgan la cabeza y el cuello que lucha por los derechos de los trabajadores en la mayor parte de casos. Esta cabeza y cuello arriesgar no son sólo una palabra. Año tras año muchos sindicalistas son asesinados, demasiado. Matado por comandos de asesino que son contratados por los gobiernos respectivos, empresas en gran escala ... y son protegidos contra la ley.

Si hablamos de los sindicatos occidentales - y, en esta ocasión, los sindicatos austriacos debe resistir como un diputado - mentiras simplemente cerca para mí, porque allí sé mucho al menos superficialmente sobre la situación. Cada palabra de la crítica es difícil para mí básicamente, sin embargo, soy bajado de una clase social en la cual los sindicatos siempre tenían un valor grande. Y también hoy casi cada uno está todavía en mi círculo relacionado, círculo de amigo y el círculo del amigo un miembro del sindicato. Pero lo que uno gusta básicamente, también habría que criticar si uno quiere a parecido ello además.

El sindicato no tiene ningún sentido si esto se coloca en el mismo paso con los representantes de la economía. ¿La sociedad social? Un agradable construye de las soluciones malas. Sin embargo, el descubrimiento de compromisos es sólo aquel camino que no produce a ningún ganador. Los sindicatos y los representantes de interés no deben ser ningunos enemigos, pero ellos deben ser opositores. Esto puede y poder no ser que el representante de la economía se hace el amigo personal del sindicalista. Al menos no en la mesa de negociaciones.

Ahora el único camino sensible de los sindicatos sería el camino de la extorsión. ¿Anuncio difícil en tiempos del movimiento de la industria en tierras de salario baratas? No, de nada. Desde todas aquellas empresas que harían que ventajas de un movimiento hubieran alejado ya. Aquellas empresas que todavía son aquí son dependidas en el trabajador y la calificación de su mano de obra, aquí. Ello no ser de tal modo, entonces ellos estarían también ya lejos. Como las multinacionales hizo. Y si uno habla no de multinacionales, pero es conducido por la empresa todavía patriarcal, entonces la situación no es también diferente.

Emprende el mío, libremente después de consideraciones económicas modernas que el sentido de su existencia consiste en la fabricación del dinero máximo. Básicamente ellos no se preocupan como este objetivo podría ser conseguido. Y aquí el sindicato debe enganchar y decir "No". "No" a empeoramiento del sueldo. "No" a protección suave hecha contra despido improcedente. "No" a la mantequilla de logros sociales de las empresas. "No" a modelos unilaterales en las horas de trabajo adaptables. " NO" a una ideología que no conoce a ninguna gente.

El sentido de la economía sería apuntado usando ressources planeado y moderatley. Los valores que son hechos deberían hacerse así a todas las aclamaciones. El empleado, la economía nacional, al estado ... y, también al empresario. En aquella medida que él gana para su riesgo y su despliegue del trabajo. El único camino para el sindicato que puede conducirnos al menos sabio por el principio en dirección de esta Utopía es la extorsión y las negociaciones difíciles sin compromisos deteriorados. Todos otro conducen atrás en tiempos que probablemente no queremos experimentar.

gracias por estar ahì

Miguel de Cervantes

1 Kommentar:

Anonym hat gesagt…

Hallo.
Ich mochte mit Ihrer Website migueldecervantes.blogspot.com Links tauschen